Para la Iglesia Católica, la fiesta de la Epifanía del Señor, que se celebra el 06 de enero, se relaciona con el momento en que Jesús fue dado a conocer a los Reyes Magos.
La fiesta de Epifanía celebra la manifestación del Señor como Hijo de Dios a los Reyes Magos, los sabios que fueron desde Oriente a adorar la presencia de Cristo. En la doctrina católica, el niño Jesús se revela ante los Magos, representantes de otras civilizaciones y del mundo pagano, que lo identifican como el Mesías.
La llegada de un Salvador había sido anunciada en varios textos del Antiguo Testamento por lo que este momento es de gran importancia. El encuentro con Jesús aparece relatado en el Evangelio según San Mateo: “Al ver la estrella, los sabios se llenaron de alegría. Luego entraron en la casa y vieron al niño con María, su madre. Y arrodillándose, lo adoraron. Abrieron sus cofres y le ofrecieron oro, incienso y mirra». (Mt 2:10-11)
En esta fecha celebramos la manifestación de Dios a todos los hombres del mundo, a todas las regiones de la tierra. Es un día de alegría y agradecimiento porque al ver la luz del Evangelio, salimos al encuentro de Jesús, lo encontramos y le rendimos nuestra adoración, tal como hicieron como magos.
